A diferencia de otros delitos más evidentes, en el caso del alzamiento de bienes, la persecución penal debe ir acompañada de pruebas contundentes que demuestren las prácticas malintencionadas y fraudulentas.
El robo de inmuebles es un problema que afecta a miles de propietarios en Guatemala cada año. Existen organizaciones criminales que se dedican a conseguir inmuebles fraudulentamente.