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En línea con políticas a favor del medio ambiente, Guatemala busca contrarrestar la contaminación, darle un giro a la disposición final de los desechos sólidos y aprovechar los materiales de productos que se convierten en basura. Por ello, a partir del 11 de agosto próximo, se deberá implementar la “clasificación secundaria” de basura, la cual obliga a gestionar los residuos y desechos orgánicos e inorgánicos: papel-cartón, plástico, vidrio, multicapa y metal. Estas disposiciones se encuentran en el Acuerdo Gubernativo No. 164-2021, “Reglamento para la gestión integral de los residuos y desechos sólidos comunes”.
¿Quién debe cumplir esta regulación?
Cualquier persona, individual o jurídica, pública o privada, nacional o extranjera que, como resultado de sus actividades produzcan residuos o desechos sólidos comunes. Es decir que, todos los habitantes y personas que transite por el país estarán obligadas a cumplir con la clasificación.
¿Cuál es la forma de clasificar los residuos y desechos sólidos?
La regulación divide los desechos en dos categorías generales: orgánicos e inorgánicos. Estos deben separarse según los siguientes criterios:
A partir del 11 de agosto, se introducirá una clasificación adicional para los desechos inorgánicos. Los siguientes son los siete tipos de residuos que deben clasificarse de acuerdo con sus materiales:
La clasificación también se extiende a otros como lo son:
¿De qué forma se almacenan los residuos?
Para la separación, se deberá contar con “infraestructura destinada al almacenamiento temporal,” como recipientes con el color que identifiquen a cada tipo de residuo.
¿Qué se debe hacer luego de la clasificación?
El siguiente paso es la fase de recolección y transporte, el cual consiste en la recogida y acopio de residuos y derechos, para que estos luego sean trasladados para su tratamiento o disposición final.
Esta fase cuenta con sus propias regulaciones y deberá de adaptarse a los planes municipales para la gestión integral.
¿Qué sucede si no se cumple con el reglamento?
Se impondrán sanciones por inobservancia, incumplimiento y violación a las normas. El Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN) podrá:
- Imponer multas, las cuales serán fijadas de acuerdo con los parámetros de salarios mínimos no agrícolas vigentes, conforme a la gravedad de la infracción cometida
- Establecer un periodo de tiempo para implementar las medidas y acciones correctivas que permitan alcanzar el nivel de cumplimiento requerido.
Consejos prácticos para una gestión adecuada de residuos y desechos sólidos
Todos estamos obligados a cumplir con esta nueva clasificación de residuos. A continuación, ofrecemos algunos consejos prácticos para facilitar este proceso y contribuir a la salud de nuestro medio ambiente:
- Reducir, reutilizar, reciclar y disponer: estos cuatro términos representan las mejores prácticas para gestionar todos los productos que usamos. Siempre que sea posible, reduzca la cantidad de basura generada, reutilice los productos, recicle los materiales y disponga de los residuos de manera responsable.
- Identificar los tipos de plástico: es esencial aprender a identificar los diferentes tipos de plásticos ya que algunos son reciclables y otros no. Con esta información, podremos tomar decisiones más informadas sobre los productos que compramos y cómo deshacernos de ellos.
- Elija envases reutilizables: opte por recipientes reutilizables y amigables con el ambiente, como pachones o termos, recipientes de vidrio para llevar su comida, y elija envases retornables siempre que sea posible. Estos hábitos disminuirán la cantidad de basura que generamos.
- Desechar residuos limpios: los objetos que se van a reciclar deben estar secos y limpios, libres de grasas y restos de alimentos. Este paso asegura que los materiales sean reciclables y no contaminen a otros productos.
- Educar sobre la separación adecuada: es crucial educarnos y a quienes nos rodean sobre el proceso correcto de separación de residuos según el tipo de material. Además, debemos difundir las buenas prácticas para la disposición de residuos.
Como parte integral de la sociedad, es imprescindible que comprendamos y cumplamos con la nueva regulación sobre la clasificación de residuos y desechos sólidos en Guatemala. Esta normativa es crucial para fortalecer nuestra responsabilidad social y ambiental, y para evitar sanciones. Cumplir con estas directrices es una forma tangible de alinear nuestras acciones con los principios de responsabilidad social empresarial y los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobierno corporativo), resaltando la importancia de la sostenibilidad y la ética en nuestras operaciones diarias.
El manejo adecuado de residuos no solo beneficia al medio ambiente, sino que también contribuye a nuestra imagen como ciudadanos y empresas responsables ante la sociedad.
